Cuando una cuestión difícil se vuelve crónica y tiende a repetirse una y otra vez, merece la pena preguntarse por cuáles son las soluciones intentadas que se han convertido ya en un ritual o hábito y que no permite que se produzca el cambio deseado (Adorna, 2013).
- Escribe el problema que quieres solucionar, que parece repetirse una y otra vez y que por mucho que lo has intentado, no se ha resuelto. A continuación, anota algunas soluciones que hayas puesto en marcha para su superación y que consideras que han sido desacertadas.
Pena profunda
- Si crees que esas soluciones no han sido efectivas o que han agravado el problema o provocado otros, piensa y escribe cinco maneras diferentes de actuación.
- Por último, elige una de ellas e inventa una historia donde el protagonista se enfrenta con esa misma situación y pone en práctica la acción elegida. Si, una vez escrita la historia, descubres que la solución no es de tu agrado, prueba con otra de las propuestas.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada